23/03/2016

Tucumán

Y un día volvió Luis Falú a la Facultad de Filosofía y Letras

En una emotiva actividad se realizó la donación de los libros a la biblioteca de quien fuera alumno de esa universidad y secuestrado en 1976.
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Lucho Falú volvió a la Facultad de Filosofía y Letras de la mano de sus libros.

Luis Eduardo Falú, quien fuera alumno de la Facultad de Filosofía y Letras, y desaparecido en 1976 volvió a la universidad de la manos de sus libros. En una emotiva actividad se realizó la donación de los mismos a la biblioteca, y Juan Falú cerró la jornada con un homenaje musical a los estudintes desaparecidos.

¿Qué decimos o a qué nos referimos cuando hablamos de memoria?
Es una pregunta recurrente y que, en pleno mes de marzo y en las visperas del 40 aniversario del golpe de Estado cívico-militar, nos remite a las víctimas del terrorismo de Estado que en Tucumán, vale decirlo, comenzó muccho tiempo atrás con el denominado Operativo Independencia.

"Tantas veces me mataron...sin embargo estoy aquí resucitando", dice esa bella canción de María Elena Walsh a la que nuestra Mercedes Sosa supo inmortalizar con su voz incomparable.

Y, siguiendo con estos pensamientos, una de las formas de volver, de estar, es a través de los libros y de la música.

Toda esta reflexión pretende aludir a la emotiva jornada que se realizó en la Facultad de Filosofía y Letras y que se denominó "Universidad, Verdad y Memoria".

La misma, comenzó con una mesa panel en la que  Nicolás Arata (Investigador CLACSO-UNRN-UBA ); Patricio Rovira (Fiscal Ad Hoc en causas por crímenes de Lesa Humanidad) y Daniel Yépez (Investigador de la Facultad de Filosofía y Letras UNT) abordaron desde distintas ópticas la temática que los convocó "Universidad, Verdad y Memoria".

Tras las intervenciones de los panelistas y ante un colmado anfiteatro 1, los presentes se dirigieron a la bilbioteca de la facultad y dar así inicio a uno de los momentos más emotivos de la jornada.

La decana Mercedes Leal, junto al vicerrector José García, el ministro de Educación de la provincia, Juan Pablo Lichtmajer y a Juan Falú, Ana Falú, hicieron el tradicional corte de cinta que dejó inaugurado el nuevo salón de lectura de la biblioteca.

Al ingresar, una mesa repleta de libros considerados "peligrosos" hace 40 años, esperaban a los presentes. Se trata, precisamente, del material bibliográfico de Luis Eduardo Falú, quien estaba estudiandoen el 4º año de la carrera de Historia hasta que, en septiembre de 1976, fue secuestrado y desaparecido. 

Cada uno de esos 99 textos, "La guerra civil española", "La comuna de 1871", "Los de abajo", por mencionar sólo a algunos, llevaba un sello en su tapa o en sus primeras páginas y formaban parte del material de estudio de "Lucho". "Este libro perteneció a Luis Eduardo Falú. Desaparecido 1976".

Lichtmajer reconoció estar emocionado y conmovido. "Estamos celebrando la vida y ejerciendo la memoria en un país que, entiendo, es vanguardia mundial en materia de Memoria, Verdad, Justicia y Derechos Humanos, habiendo tenido el coraje de juzgar a los genocidas en su propio territorio", destacó.

A su vez, la decana aseguró que la jornada es indispensable en materia de Memoria, Verdad y justicia. "Queremos, de algún modo, honrar a nuestros estudiantes desaparecidos, y también hacer un homenaje a los docentes cesanteados. Al recibir la donación de la biblioteca de Luis Falú, reivindicamos también este lugar como un espacio de cultura, de intercambio de ideas". afirmó Leal.

A modo de reflexión, Juan Falú compartio la emoción al ver los libros de Lucho. "Son libros, todos con un contenido político, ideológico e histotico que muestra no sólo la canitdad, sino la calidad de la lectura de mi hermano. Expresan una clara definición de la opción que había asumido en aquellos tiempos cuando el estudiantado universitario empezó a entender la problemática nacional y, como cualquier proyecto revolucionario, tenía que prestarle atención al desarrollo de las luchas de los trabajadores y su experiencia política", evaluó y recordó su paso como estudiante: "aquí comenzaron nuestros sueños y nuestras luchas".

Ana Falú también se emocionó y consideró: "es como traer de nuevo a mi hermano a la vida". "Me siento orgullosa de mi hermano, de mi familia, por tomar esta decisión de traerlo a Lucho de nuevo a las aulas, de la Universidad, de la Facultad, del propio Gobierno en la figura de su ministro de Educación. Todo esto es un círculo virtuoso que tenemos que profundizar y continuar", aseveró.

La jornada continuó en el anfiteatro 1, donde se proyectó "No olvidamos", una serie de videos producidos por LUPA (productora audiovisual de la Facultad). Se trata de varios cortos en los que se entrevistó a distintos ex docentes cesanteados o a familiares de detenidos desaparecidos, quienes cursaron en esa casa de estudios.

Finalmente, Juan Falú, con su guitarra, ofreció un concierto en homenaje a Lucho y a la comunidad educativa de la facultad, no sin antes mostrar su característico sentido del humor.

Fue una jornada a pleno en la que la memoria fue el denominador común y en la que la memoria de Lucho a través de sus libros y de los relatos de familiartes y ex compañeros, estuvo siempre presente.



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