El avance tecnológico se viene con todo y planea destituir por completo a la humanidad, no solo con herramientas como la inteligencia artificial o los robots humanoides, sino que aparecen en escenas otro tipo de artefactos que nos querrán dejar fuera de juego por completo. Este nuevo invento llega al mundo como una caja de pandora, llena de sorpresas y del tamaño de una torre de computadora.
En este contexto, aparece el concepto de computación cuántica, el cual durante muchos años ha sido una idea el futuro, relacionado a la complejidad y a la ciencia ficción. No obstante, ese futuro está llegando más rápido de lo que muchos se imaginan, al parecer se encuentra a la vuelta de la esquina. Asimismo, se anunció que una de las potencias asiáticas está dando pasos firmes en relación a la creación de estos ordenadores cuánticos.
El país oriental y una apuesta cuántica
El gigante asiático lo hizo otra vez: sorprende al mundo con sus avances tecnológicos y saltos paradigmáticos. En esta oportunidad está realizando experimentos con tecnologías vanguardistas, ya que llega al mercado con una caja misteriosa similar a una torre de PC. Es decir, China está innovando en la creación de ordenadores cuánticos, con herramientas capaces de elaborar hasta ocho artefactos en simultaneó, marcando un punto de inflexión en la tecnología mundial.
Este invento viene de la mano de la empresa china, SpinQ, que rompió completamente con la estética imponente de los majestuosos Google, IBM o Honeywell, apostando todo a un ordenador compacto, muy diferente a los que ya existen. Sin embargo, lejos de seguir las tendencias del momento, la tecnología que contiene este artefacto sigue la línea tradicional, la RMN (resonancia magnética nuclear).
¿Qué objetivo tiene este artefacto chino?
Al parecer, el secreto de SpinQ está en la utilización de partículas de átomos en el interior de las moléculas para poder así codificar datos cuánticos con éxito. Asimismo, el espín utilizado en el proceso es una pieza fundamental al igual que la carga eléctrica, lo que permite crear cubits más sencillos y más operativos, mucho menos exigentes que lo que fabrican la competencia. En la actualidad la empresa de tecnología está marcando ampliamente la diferencia, incluso aquí en Argentina.
Uno de los modelos que fabrica la compañía es el ordenador NMR, (el cual no es nuevo en el mundo de la ciencia, ya que esta máquina fue creada hace más de 20 años, específicamente en el año 2001) es un artefacto basado en tecnología cuántica en la que se ejecutó por primera vez el algoritmo de factorización. No obstante, no todo son beneficios y satisfacciones, este tipo de cubits es muy sensible al ruido, lo que complejiza mucho su adaptación a procesadores de gran escala.
Por lo tanto, la empresa china no se limita a producir para el sector experimental o educativo, ahora tiene un objetivo mayor. Aunque sus modelos más accesibles cuentan con precios reducidos dentro de estos sectores, SpinQ también produce maquinarias más grandes y potentes. En este sentido, tiene en mente lanzar al mercado un operador cuántico de más de 100 cúbits antes de fin de año.
El imperio chino sueña a lo grande
La compañía SpinQ tiene el sueño de crear un operador cien por ciento funcional para poder llegar a resolver problemas del mundo real dentro de 10 años. Este es un sueño muy ambicioso, pero para nada imposible, ya que la empresa cuenta con ayuda del Gobierno chino. Es decir, que la empresa SpinQ recibe apoyo financiero por parte del estado asiático, acompaña el desarrollo de universidades y trabaja con los mismo objetivos estratégicos que plantea el país en materia de tecnología cuántica.
Mientras que la empresa multinacional estadounidense, IBM ya cuenta con procesadores de más de mil cúbits, el país asiático sabe que este es un camino de ida y están dispuesto a darlo todo por no quedarse atrás en el desarrollo cuántico y el boom de la inteligencia artificial.