Al cumplirse la primera semana de aplicación de los carriles reservados para ómnibus, como parte del Plan Integral de Movilidad Urbana (PIMU), desde la Secretaría de Movilidad Urbana de la Municipalidad de San Miguel de Tucumán, reiteraron que habrá sanciones severas para los conductores que no cumplan con la medida.
El titular del área, Benjamín Nieva, afirmó que «no solo se levantarán actas durante los operativos en la vía pública con más de 100 agentes municipales, sino que también se notificarán las infracciones captadas por cámaras de vigilancia y registradas por personal del Centro de Operaciones y Monitoreo (COMM)».
Nieva participó este lunes en una reunión presidida por la intendenta Rossana Chahla, donde se definieron detalles del sistema de multas a aplicar. En la sesión, realizada en la sede municipal de 9 de Julio y Lavalle, estuvieron presentes el secretario de Gobierno, Martín Viola, el fiscal Municipal, Conrado Mosqueira, la directora del COMM, Mariela Cortez, y representantes del Tribunal de Faltas (TF), entre otras autoridades.
“Es fundamental que se respete de manera rigurosa el decreto que establece los carriles exclusivos para el tránsito de ómnibus, los cuales no deben ser ocupados por vehículos particulares ni utilizados para estacionar”, explicó Nieva.
El funcionario detalló que “con la ayuda tecnológica del COMM, en los primeros cinco días hábiles de implementación del PIMU, se registraron más de 1100 infracciones, por lo que próximamente los propietarios de esos vehículos serán notificados vía correo”.
Nieva enfatizó que “se sancionará no solo a los conductores que invadan los carriles exclusivos de ómnibus, sino también a los vehículos estacionados en dichas áreas, obstaculizando el flujo del servicio de transporte”.
Asimismo, Nieva aclaró que todas las infracciones serán remitidas al Tribunal de Faltas, para determinar el monto de las multas. En este sentido, adelantó que “las multas son cuantiosas, comenzando en $ 45000 y aumentando en caso de reincidencia”.
El secretario de Movilidad Urbana subrayó que “esta medida no busca recaudar, sino garantizar el cumplimiento de las normas, permitiendo que los vehículos particulares circulen por la izquierda, respetando los carriles de la derecha, reservados para el transporte público, para que el PIMU sea exitoso”.
Según Nieva, durante esta primera semana “se ha observado un alto grado de cumplimiento por parte de las empresas de ómnibus, pero lamentablemente los automovilistas y, en especial, los motociclistas, están invadiendo los carriles destinados a los ómnibus”.