Los gremios nucleados en el Frente de Unidad Docente Estatal (FUDE) realizaron esta noche una marcha de antorchas en la Plaza Independencia, tras haber rechazado la propuesta de un bono de $80.000 en dos cuotas de $40.000, a pagarse en mayo y julio.
Paralelamente al reclamo de los docentes, el Gobierno provincial avanzó en las negociaciones con otros sindicatos estatales. En estas mesas de negociación salarial, se presentaron mejoras respecto a las primeras ofertas de esta semana.
De hecho, el objetivo del Poder Ejecutivo es intentar cerrar los primeros acuerdos de recomposición salarial el próximo martes.
Según trascendió, la alternativa que se estaría considerando con algunos gremios incluye el pago de $50.000 en mayo como suma fija, manteniéndose este monto en junio (con $25.000 adicionales en el medio aguinaldo, a pagarse antes del 20 de junio). En julio, la suma fija aumentaría a $100.000, llevando el salario mínimo de los estatales a un promedio de $500.000 de bolsillo, según explicaron fuentes de la Casa de Gobierno.
Además de las cuestiones salariales, se están analizando diferentes aspectos específicos de cada sindicato, ya que cada uno plantea demandas particulares. La intención general del Poder Ejecutivo es, una vez firmado el acuerdo, avanzar con el pase a planta permanente de los empleados transitorios que cumplan con las condiciones previstas por la normativa.
Por último, en caso de alcanzar un acuerdo el martes, el gobierno tiene la intención de reabrir la mesa de diálogo con los gremios estatales en agosto “para tratar lo que quede pendiente ahora”. De todos modos, las conversaciones continúan y no hay nada definido aún. El lunes será el turno de escuchar la oferta oficial para los representantes de la Policía y de los sindicatos de la Dirección Provincial de Vialidad y del Instituto de la Vivienda, entre otros.
Rechazo
En los últimos días, los equipos liderados por los ministros Regino Amado (Gobierno y Justicia) y Daniel Abad (Economía y Producción) coordinaron reuniones con los referentes de los distintos sindicatos estatales. A ellos se sumaron los ministros de las áreas pertinentes (Susana Montaldo para los gremios de Educación y Luis Medina Ruiz para Salud, entre otros).
Los secretarios generales de cada sector coincidieron en rechazar la propuesta del bono de $80.000 en dos partes, principalmente porque, al ser un anticipo a cuenta de las paritarias, el monto no se incorporaría a los haberes de los trabajadores.
Nora Yenad, secretaria adjunta de ATEP, no ocultó su malestar. Aunque aclaró que se había pasado a un cuarto intermedio, trasladó la alternativa propuesta por el Gobierno nacional al Congreso de su gremio, que cuenta con unos 15.000 afiliados. “La propuesta del bono ha generado tanto malestar que la docencia lo sintió como una cachetada”, destacó Yenad. El objetivo del Frente de Unidad Docente (FUD, también integrado por ATEP) es que en estas paritarias se otorgue un incremento del 50% sobre el básico que perciben los trabajadores de la educación. De este modo, según la dirigente gremial, este ítem pasaría de los $75.000 actuales en promedio a unos $110.000. “Y seguiríamos por debajo de la canasta básica”, remarcó Yenad.
Además de ATEP, otros sindicatos que integran el Frente Docente se sumaron a la marcha de antorchas, entre ellos la Asociación del Magisterio de la Enseñanza Técnica (AMET) y la Unión de Docentes de Tucumán (UDT). La intención del Poder Ejecutivo es reunirse nuevamente con los referentes de la educación la próxima semana y llegar a un acuerdo para evitar un posible paro progresivo, una medida de fuerza anticipada por los sindicatos.